En muchas ocasiones, cuando hablamos de redes municipales inalámbricas, no se entiende que las mismas no consisten en ofrecer simplemente acceso a Internet pagado por el municipio. Esa es la visión que normalmente se tiene cuando se hablan de este tipo de redes. Sin embargo, las posibildades que ofrecen son enormes, tanto en su número como en los posibles usos que se puedan dar sobre las mismas. Vamos a listar algunos de los servicios que se pueden ofrecer gracias al uso de redes públicas de telecomunicaciones. * Conexión WiFi para el envío de datos relacionados con la seguridad de la ciudad y la gestión de la misma (multas, videovigilancia, etc.) * Infraestructura Inalámbrica para la videovigilancia en determinadas zonas de la ciudad como monumentos o complejos artísticos importantes * Infraestructura inalámbrica para el envío de reports relacionados con la lectura de los contadores del gas, electricidad y agua. * Infraestructura para la colaboración en grupo en empresas de limpiezas y saneamientos de la ciudad. * Infraestructura para la distribución de todo tipo de mensajes a través de la plataforma de anuncios digital del ayuntamiento, * Infraestructura para el envío de todo tipo de mensajes (SMS, MMS, Videos) al conjunto de ciudadanos * Infraestructura para la colección de todo tipo de información medioambiental (acustica, aire, luminosa, contaminación) * Infraestructura para el reporte de todo tipo de información relacionada con el parking de la ciudad * Infraestructura para la colección de información sobre el estado del tráfico de la ciudad. * Infraestructura para la localización de todo tipo de personas y monitorizarlas * Infraestructura para la consulta en tiempo real de todo tipo de GIS relacionados con la gestión de la ciudad * Infraestructura para conocer en tiempo real la situación de todo tipo de establecimientos en relación con las licencias de apertura, horario de cierres y aforo máximo. Éstas son algunas de las aplicaciones que vienen. O un ayuntamiento construye su propia red y la amortiza con cientos de servicios en los próximos años, o tendrá que pagar por el uso de las redes de los operadores privados. Lo primero conlleva una bajada de los impuestos a la vez de un claro aunmento en la eficiencia de los servicios, La segunda implica un incremento en los impuestos, además de un peor servicio municipal en comparación con el de otras ciudades con redes inalámbricas propias. Por eso hemos de hacer ver al conjunto de los políticos españoles y de gobernantes locales, la importancia que tienen las redes inalámbricas, que estas son claves en el futuro de nuestras ciudades. No serán la condición única para que las ciudades del siglo XXI sean realmente smart cities pero sí serán imprescindibles. El resto, es sinceramente, no tener mucha visión del futuro, de lo que viene, y aquí no hay dobles tintas.