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Vivimos en un mundo en que los próximos diez años aproximadamente, van a ser los decisorios para todas y cada una de las sociedades del mundo. En cada una de nuestras ciudades, las oportunidades de implantar las infraestructuras necesarias y dinamizar industrias que las preparen para lo que viene, o se cogen, o serán tomadas por otras ciudades y áreas económicamente más desarrolladas, que las ganarán en su batalla. Hace muchos posts, recogíamos cuáles eran las características que las ciudades del siglo XXI que quisieran estar en la vanguardia, deberían mantener: • La diversidad de su economía (que no sea un monocultivo) • Una población laboral bien formada • La conectividad (la capacidad de mover átomos, transporte, y bits, telecomunicaciones) • La capacidad de implementar proyectos estratégicos de largo plazo • La innovación de las empresas y organizaciones de la ciudad • La calidad de vida (social, cultural y ecológica). Estas son algunas de las preguntas básicas que cada una de las ciudades debería preguntarse a la hora de saber dónde focalizar las políticas que normalmente se realizan dentro de una ciudad. En estos lares, principalmente nos dedicamos a hablar de la conectividad y de su importancia, sobre la innovación en las empresas y organizaciones de la ciudad, así como en otras ocasiones, por la clidad de vida existente. La vida cambia, de una manera muy rápida, y las mejoras tecnológicas que se producen, harán que ésto cambie mucho más rápido, por eso, debemos necesariamente prepararnos para sobrevivir, o morir a medio plazo... y ésto es lo que nos enseña una de las tecnologías que vienen, que van a transformar la vida de nuestras ciudades. En Irlanda, cómo no, un país que apostó decidididamente por el futuro a finales de los 90, acaban de otorgar una licencia de uso del espacio radioeléctrico a una empresa de investigación para probar un estandar de lo que se llama Software Defined Radio. El Software Defined Radio es un tipo de tecnología que permite que cualquier transmisión que se realiza vía radio, pueda recombinarse automáticamente para poder acceder a todo tipo de nodos de telecomunicaciones permitiéndole saltar de uno a otro, hasta llegar a su destino. En otras palabras, los datos, usarán aquellas redes que se encuentren a su alcance, utilizando las mismas, independientemente de la frecuencia a la cual operen. En otras palabras, la conectividad eficiente. La primera vez que leímos sobre este término fue allá en el año 2003, en el libro Brave the Unwired World, y desde entonces, entendimos perfectamente que la cuestión de la infraestructura inalámbrica es radical para cualquier ciudad. Por eso, desde el 2004 hemos clamado por la existencia de redes inalámbricas. Primero para los ayuntamientos que tienen la obligación, de dotarse de este tipo de redes e introducir un criterio de eficacia y eficiencia en la gestión de nuestro dinero, y segundo para todo el sector privado, que le permita poder conectarse a las redes en cualquier momento y en cualquier lugar. Por eso, proyectos como FON, deben siempre ser bienvenidos, ya que entre otras cosas, fomentan la existencia de una red, y eso es lo fundamental, que haya redes de una manera ubicua, que este tipo de tecnologías puedan usarse. Redes ciudadanas, redes libres, redes del sector privado, todas son complementarias. La cuestión es que las tenemos que tener. Hasta entonces, uno de los pilares del futuro de las ciudades, se tambaleará. Y eso, es lo que vemos todos los días en nuestras ciudades, o no?
