"Cuando Google sea ubicuo, el mundo habrá cambiado". Alguna vez hemos dicho esta frase con la firme convicción de que el día que una persona pueda averiguar la información sobre otra en tiempo real, el ámbito profesional cambiará para siempre. La red trae los llamados sistemas de reputación que no son otra cosa, que poder "clasificar" personas basadas en precisamente eso, su reputación. Gracias al histórico que la red comienza a ofrecer sobre muchas personas, el CV de una persona, las cosas que hace o no hace, son trazables. Eso tiene muchas implicaciones...
Hoy nos encontramos vía Smartmobs con la noticia sobre cómo existe una web que permite poder comparar entre personas. En otras palabras, cómo de apreciado eres en función de las veces que apareces en las listas de amigos del Messenger de American Online, o lo que también se puede traducir cómo quien es más cool, más guay, que tiene más amigos, etc. (Aquí tienes un artículo del periódico artículo de Washington Post que explica bien algunas historias de utilización de los mismos) Cuando ya Google Fight ofrece esta característica para poder comparar entre diferentes palabras, y ahora aparece AIM Fight, que permite poder clasificar personas, las relaciones socioeconómicas, cambiarán radicalmente. Creemos que una nueva clase social emerjerá y este tipo de herramientas serán la base de las mismas. Imaginemos cómo dentro de 10 años sería el llamado bullying, es decir, la exclusión sistemática y abuso sobre unos chavales a otros. Éste vendrá determinado por herramientas de este tipo que clasifiquen en función de algoritmos y que excluya de conversaciones y de relaciones sociales a personas. A los mismos los acosarán en función de sus popularidades... ¿Y quién sabe cómo tratar ésto? ¿Quién serán las personas quién será el que determine cuál es el algoritmo necesario para la clasificación? ¿Será posible manipular el algoritmo para prevenir de acosos a chavales? ¿Si no es así, quién es el que va a determinar este algoritmo? Se está produciendo una transformación social desde abajo que no creo que las generaciones que los preceden, entre otros, la generación X a la cual pertenecemos, somos capaces de entender. El mundo de alguna manerá sufrirá nuestro desconocimiento.