El kilo de eurócrata en el mercado

Cuando escribimos de vez en cuando en el blog usando palabras malsonantes, las personas que más nos quieren y nos leen nos advierten de que el uso de este tipo de palabras, quita brillo a nuestra argumentación. Pues hoy, siento decirle a estas personas, que mañana me van a decir lo mismo....hay que joderse con el Consejo Europeo Hoy se ha aprobado las famosa directiva de las patentes de software con tácticas subterfugias y antidemocráticas, pasándose por el arco del triunfo lo que el Parlamento Europeo y diferentes instituciones europeas han apoyado que no se produzcan, ésto es, las patentes de software, además de las propias reglas que se ejercen en el Consejo de Presidencia. Ignorando completamente las reglas de juego, han introducido un cambio de última hora que ha permitido que las patentes de software hayan sido aprobadas por el Consejo de Presidencia. ¿Esta es la política europea que la clase política nos ha vendido para pedir el SÍ? Hay que ser sinvergüenza para haber aprobado la directiva sobre patentes de software y de una manera totalmente ilegal e ignorando completamente la oposición del Parlamento Europeo así como de diferentes países miembros de la Unión Europea. El poder y cómo lo ejercen los miembros del Consejo Europeo llega a niveles alarmantes, máximo cuando parece verse que el kilo de eurócrata cotiza libremente en el mercado...por lo visto, está más bien poco. Nota: La directiva sobre patentabilidad del software introduce la posibilidad de que cualquier pequeña empresa de software pueda ser denunciada por parte de otra empresa y/o despacho de abogados que tenga en cartera patentes, amenazándole conque la aplicación OpenSoftware Turbo de la pequeña empresa viola "x" diferentes patentes de la empresa. Este hecho simplemente, implica unos costes iniciales de los servicios jurídicos de la pequeña empresa en muchos casos inasumibles, y una mínima prolongación en el tiempo, la arruinaría totalmente. En el siglo XXI, donde las infraestructuras de nuestra sociedad están conformadas por aplicaciones de software, patentar la base del desarrollo socioeconómico de toda la Unión Euopea, es no sólo corto de vistas, sino un atentado contra toda la Humanidad, para beneficiar a sólo unos cuantos agentes ávidos por controlar lo incontrolable, el conocimiento en el siglo XXI.